Por
lo general vivimos mirando el exterior tratando de hacer cambios y buscando
respuestas que solo encontraremos dentro de nosotros mismos, allí dentro esta la fuerza y la pasión que necesitamos
para producir el cambio que queremos ver en nuestra vida y en la vida de la
gente que nos rodea, automáticamente
empezamos a cambiar de manera positiva, veremos cómo nuestro entorno también cambia.
Los
seres humanos fuimos creados con un propósito y es al mirarnos al espejo interior de manera consiente y sin auto-engaños cuándo podremos verlo, al dejar de
visualizarnos como agredidos del mundo y empezar a responsabilizamos por nuestro bienestar tomando las riendas de nuestras vidas podremos marcar
la diferencia en el mundo en que vivimos, cuando aprendemos a compartir no solo
las cosas materiales si no también
nuestra alegría, nuestra fe, nuestro amor, nuestra pasión por las cosas,
creamos a nuestro alrededor una atmósfera que solo puede traer buenos resultados.
Es tiempo de empezar a ver que puede cambiar la persona que vemos reflejada en el espejo, que podemos ofrecerle al mundo, a nuestra familia, amigos,compañeros de trabajo, a nuestros empleadores y empleados, darnos cuenta de que fuimos creados para
ser luz, para ser la sal que de sazón a todo lo que tocamos, eliminemos los bloqueos
que nos impiden amar de manera abierta, tomemos la decisión de ser esa persona maravillosa
creada a imagen y semejanza de nuestro creador.
Podemos hacer la diferencia, empecemos por el hombre o la mujer del espejo!
Con
Amor.
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